La Iglesia Católica celebra la Jornada Mundial del Enfermo
El pasado día 11 de febrero la Iglesia Católica celebró la Jornada Mundial del Enfermo, con motivo de la conmemoración de la Beata María Virgen de Lourdes. De esta manera, la Iglesia de Roma, dirigida por el Papa Benedicto XVI, intenta despertar en la sociedad la sensibilización necesaria por el sufrimiento de las personas que padecen algún tipo de enfermedad.
Cada año, en el aniversario de la memoria de Nuestra Señora de Lourdes, que se celebra el 11 de febrero, la Iglesia propone la Jornada mundial del enfermo.
Esta circunstancia, como quiso el venerable Juan Pablo II, se convierte en una ocasión propicia para reflexionar sobre el misterio del sufrimiento y, sobre todo, para sensibilizar más a nuestras comunidades y a la sociedad civil con respecto a los hermanos y las hermanas enfermos.
Si cada hombre es hermano nuestro, con mayor razón el débil, el que sufre y el necesitado de cuidados deben estar en el centro de nuestra atención, para que ninguno de ellos se sienta olvidado o marginado”. De esta manera comenzaba el Papa Benedicto XVI el mensaje con motivo de la XIX Jornada Mundial del Enfermo y que tuvo como título “Por sus llagas habéis sido curados”.
El 25% de los enfermos de SIDA en el mundo es atendido por la Iglesia Católica (bien sea por organismos eclesiales o por ONG católicas). Además, el estudio refutado por el Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud (Ciudad del Vaticano), critica la escasez de ayudas públicas destinadas a esta enfermedad. Lo que no acabo de comprender es, si tan implicadas están las estructuras eclesiales en el tratamiento de una enfermedad tan devastadora como el SIDA